Una de las fases importantes cuando estoy preparando un viaje es investigar sobre la gastronomía de los lugares que vamos a visitar, para una vez allí no perdernos alguna delicia por no saber qué es. Cuando planeábamos nuestro viaje a Canadá, y vi que lo que se consideraba como el plato más típico era el Poutine, me quedé un poco sorprendida. ¿Un plato a base de patatas fritas y queso?
Luego cuando escuchamos también sobre las especialidades con carnes de caza, la ternera triple A de Alberta, o el marisco, nos quedamos ya más tranquilos. Jajaja. Y la verdad es que disfrutamos mucho la gastronomía de Canadá. Por ejemplo, salmón salvaje y ternera AAA en Valemount o la extraña mariscada (¡con chorizo!) que comimos en Vancouver.
Sin embargo, llegó el día en que probamos el poutine (cuyo nombre vendría a significar algo así como “mezcla rara”), y nos quedamos francamente sorprendidos. ¡Estaba buenísimo! Eso sí, una guarrería calórica de la que no se puede abusar. Pero vino perfecto como lunch rápido en la calle para hacer un descanso en un día de visitar Calgary y reponer fuerzas. No en vano, es el streetfood más típico de Canadá.
Tenía ganas de prepararlo en casa, porque es la típica receta llena de sabor y fácil de preparar que de vez en cuando apetece. Y además, me trae muy buenos recuerdos de nuestro viaje a Canadá.
Básicamente, el poutine consiste en patatas fritas, queso poco curado y salsa de carne, todo mezclado. No es la receta más sana del blog, desde luego. Pero de vez en cuando hay que darse algún capricho, ¿no?
Como hemos dicho, lleva salsa de carne, pero hacer esta receta de poutine vegetariana, es tan fácil como cambiar el caldo de pollo o ternera, por caldo de verduras.
Ingredientes: (Para 2 personas)
- 4 o 5 patatas medianas
- queso poco curado (yo he usado una bola de mozarella de búfala)
- aceite de oliva para freir
Para el gravy:
- 1 y 1/2 cucharada de mantequilla
- 1 cucharada colmada de harina
- 300ml. de caldo (vegetariano o de carne) aprox.
- 1 cucharada de miel
- 1/2 vaso de vino tinto (opcional)
- 1 pizca de pimienta negra
Elaboración del poutine
- En primer lugar, vamos a preparar las patatas. Las mondamos y lavamos, cortándolas en bastones de 1cm de grosor aproximadamente. Las salamos en crudo, mezclando bien con las manos.
En una sartén con abundante aceite de oliva caliente, freímos las patatas hasta que estén doradas. Lo ideal es que queden crujientes por fuera y tiernas por dentro.
- A parte, en otra sartén, ponemos a derretir la mantequilla junto con una cucharada de miel. Removemos bien hasta que esté todo bien disuelto e integrado. Entonces, añadimos la harina.
- Removemos sin parar, como si estuviésemos haciendo una bechamel. Cuando la harina esté bien disuelta e integrada con la salsa, añadimos el vino tinto , para dar color.
A continuación, vamos añadiendo poco a poco el caldo según nos pida la salsa. Otra opción es disolver media pastilla de caldo concentrado y añadir agua.
La textura que queremos conseguir es de una salsa cremosa, pero tampoco demasiado densa. Seguimos removiendo a fuego lento hasta que espese. Como el caldo ya estará salado, no es necesario añadir sal. Pero sí que le daremos un toque de pimienta negra.
- Cuando las patatas esté doradas y listas, las sacamos del aceite con una rasera, y las dejamos escurrir en papel de cocina. De manera que se absorba el aceite sobrante.
- Mientras, cortamos la bola de queso mozarella en dos, y a su vez en cubos de aproximadamente 1cm de grosor.
Mezclamos el queso con las patatas aún calientes, y vertemos la salsa gravy caliente por encima.
¡Y ya tenemos listo nuestro bol de poutine! Una receta típica de la comida callejera de Canadá.
Como os podéis imaginar, es una receta que llena bastante. Pero si aún así lo queréis acompañar de algo, (a parte de unas buenas jarras de cerveza), lo suyo es algo verde. Una ensaladita de canónigos, o similar.
¿Conocías el poutine? ¿Qué otros platos de la gastronomía de Canadá te llaman la atención? ¡Cuéntamelo en los comentarios!
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¡Que aproveche!
Querida tocaya, la envidia que me das cuando leo tus viajes, siempre digo, que nací demasiado pronto.
Cuando veo una receta con nombre raro y que traspasa nuestras fronteras,me voy derecha a ver de que se trata.
Desde luego esta receta es sorprendente, pero intuyo que en mi casa va a gustar. Como con certeza la haré te enterarás seguro.
Bss
¡Hola Rosalía!
Gracias por tus palabras. Sí que es verdad que mi generación hemos tenido las cosas bastante fácil para viajar. Menos fronteras, comunicaciones impensables hace 40 años y una industria aérea floreciente.
¡Pero nunca es tarde para viajar! Es cuestión de proponerselo.
Yo soy como tú, a mi también me entusiasman las recetas viajeras. Por eso quiero traer al blog las cosillas que voy viendo por el mundo.
¡¡Si finalmente la haces, cuéntame qué tal!! Un abrazo enorme!!
¡¡¡Guaaaa qué ricas!!! Las probé en un restaurante hace unos meses en Madrid y me quedé prendada. ¡¡Tengo que hacerlas cuanto antes después de ver tu receta!! 😛
¡Un besete guapa!
Que pintaza mas increible tienen!!besos
Hola Rosalía, siempre es bueno este tipo de comidas que aunque no son las más sanas, que más da tenemos que disfrutar de todo y eso me encanta de ti, ir a un lugar nuevo y como dírian por allí a donde fueres haz lo que vieres, pues de eso se trata de disfrutar de esas ricas comidas de calle (siempre que no sepa que hay perro o algo raro claro esta 😉 ), de los mercados de tantos lugares, se ven deliciosas tus papas, me asombra igual que a ti que este sea uno de esos platos nacionales de Canada, cuantas millas te has recorrido, me encanta conocer a través de tus experiencias siempre.
Un beso!
muy bien explicada e ilustrada la receta, a mi en lo personal no me pareció la gran cosa la poutine, aunque en Canadá es como un orgullo para ellos, yo compré la salsa gravy en Kentucky Fried Chicken para preparar mi intento de poutine.
Jejeje, desde luego que el poutine no es una delicatessen, 😆, pero es un plato curioso cuanto menos. ¡Espero que te salga bien rico tu intento!
Mira que me gustan las patatas fritas y no sabía que en Canada existía esta street food de patatas, las probaremos hacer a ver qué tal están, nosotros usamos para freír las patatas la Cosori freidora sin aceite para comer las fritangas sin remordimiento como casi vegetarianas ja ja ja ja
el poutine no se hace con mozzarella se usa un courd cheese un quseo unico q hacen los canadienses lo q esta en la receta se llama disco fries es una critica q intenta ser constructiva
Efectivamente, Federico, el Poutine se hace con cheese curds (no courd), pero es prácticamente imposible de encontrar en España. No es único de Canadá, también se utiliza en algunas zonas de Estados Unidos, pero en la cocina, al igual que en la vida, hay que adaptarse a lo que uno tiene, y aprender a disfrutar de ello. Por eso decidí adaptar la receta usando mozarella, pero como indico, se puede utilizar cualquier queso poco curado, queda muy parecido al original y el resultado es delicioso.
Gracias por aportar tu puntualización, sirve para enriquecer el blog con información extra sobre esta receta típica de Canada.
Sin duda uno de los platos más típicos de Canadá, y no me extraña porque es delicioso. Puede parecer simple pero tiene un sabor inigualable. Recomiendo probarlo si se visita el país.