Callejear por Hanoi es sumergirse en un bullicioso caos o en una calma muy agradable. Siempre hay un rincón interesante, una anécdota que vivir o una bia hoi qué tomar en el lugar más insospechado.
Callejear por Hanoi es sumergirse en un bullicioso caos o en una calma muy agradable. Siempre hay un rincón interesante, una anécdota que vivir o una bia hoi qué tomar en el lugar más insospechado.